“NiñezYA es la iniciativa de más de 100 organizaciones de la sociedad civil comprometidas con la niñez que se han unido para incidir en las agendas de candidatos a la Presidencia de la República, las Alcaldías y Gobernaciones y sus planes de desarrollo”. Con un análisis a las propuestas de campaña de aspirantes a la alcaldía de Pasto y a la gobernación del departamento, NiñezYA verificó que es mínima la inclusión de metas y estrategias para mejorar la calidad de vida de niñas y niños. NiñezYA pide a partidos políticos revisar los planteamientos de los aspirantes que sean elegidos el 27 de octubre y mejorarlos en los planes de desarrollo territorial.
Realmente preocupante que para los candidatos a la gobernación de Nariño y a la alcaldía del municipio de Pasto la niñez no cuente, o cuente muy poco. Prueba de ello es que en el informe presentado por NiñezYa “es mínima la inclusión de metas y estrategias para mejorar la calidad de vida de niñas y niños”. Nuestros candidatos, literalmente, se rajan en materia tan delicada y que debe constituirse en una prioridad para nuestros futuros gobernantes: “La mayoría de los candidatos está en un nivel deficiente al tener entre uno y cinco de los diez factores examinados por NiñezYa; le sigue el nivel aceptable al tener entre seis y siete, y solo un candidato a la alcaldía de Pasto logró sobresaliente al tener entre ocho y nueve aspectos. Los diez asuntos impostergables, o YA, como denomina esta coalición de organizaciones a los temas que revisa son: 1. Políticas públicas e inversión social, 2. Salud, 3. Educación inicial, 4. Educación preescolar, básica y media, 5. Juego, 6. Participación, 7. Fortalecimiento familiar del cuidado y la crianza, 8. Protección frente a cualquier tipo de violencia, 9. Sistema de Responsabilidad Penal para Adolescentes y 10. Cultura de paz, reconciliación y convivencia”. Temáticas que permiten avanzar en la garantía de los derechos de niñas y niños como están establecidos en la Constitución Nacional, la Convención sobre los Derechos del Niño, el Código de la Infancia y Adolescencia, la Ley 1804 de 2016 y el Plan Nacional de Desarrollo 2018-2022 ´Pacto por Colombia, pacto por la equidad.
Como lo expresa NiñezYa “En términos generales, el análisis arrojó una baja inclusión de los YA en los programas de gobierno. Si se equiparan los resultados con las calificaciones escolares, solo 0,97% de los candidatos analizados obtuvo excelente al incluir todos los asuntos impostergables para mejorar la calidad de vida de niñas y niños; 22,33%, sobresaliente al contener entre 8 y 9 asuntos; 33,98% aceptable al contemplar entre 7 y 6 YA y la gran mayoría (42,72%) deficiente al solo incluir entre 1 y 5 asuntos impostergables para la niñez”. La gran responsabilidad de los diferentes alcaldes de los municipios del departamento de Nariño y, particularmente, del próximo gobernador de Nariño consiste en avanzar y consolidar las políticas de la niñez. Como vamos, vamos mal; y todo indica que la niñez será una de las más afectadas en el caso que los gobernantes elegidos este 27 de octubre no corrijan en sus respectivos planes de desarrollo las deficiencias encontradas. “Con este panorama, si los nuevos mandatarios no hacen ajustes a sus programas de gobierno cuando los conviertan en Planes de Desarrollo Territorial estarán nuevamente en deuda con la primera infancia, la infancia y la adolescencia de sus respectivos territorios. En otras palabras, la niñez tendrá que seguir esperando por el cumplimiento de sus derechos, en especial, niñas, niños y adolescentes de la zona rural de Colombia; pertenecientes a familias que no tienen las capacidades para ser un entorno protector; que traspasaron las fronteras en busca de una mejor suerte; que tienen algún tipo de discapacidad; que viven a diario la violencia o el acoso de grupos al margen de la ley que desean captarlos para sus filas y quienes cometieron un error: contravenir la ley. Por eso la necesidad de insistir en los ¡YA!, para cambiar el presente y el futuro de niñas, niños y adolescentes del país”.
Nos unimos al clamor de NiñezYa en su llamado a pensar en la niñez, en la urgencia de generar políticas incluyentes, de salud, de juego, de educación, de recreación, de resocialización y de afecto. Nuestros niños no pueden continuar siendo los actores invisibles de una sociedad que, a través de su historia, y a pesar los logros alcanzados, hacen del niño y de la niñez un simple enunciado de justicia social. A manera de simple ilustración conozcamos algunas cifras que nos permiten entender la realidad de nuestros niños en Colombia (RNC - ¿Cuál es el panorama de la niñez en Colombia?)
“El panorama de la niñez en Colombia es preocupante y nada más complejo que hablar de esto en cifras. Según el ICBF, en el primer trimestre del año se han registrado 2.855 casos de abuso sexual infantil. Diariamente se registran 66 casos de violencia contra niños”.
“A pesar de que en Colombia la Constitución Política en su artículo 44 promueve los derechos fundamentales para los niños, como la vida, la integridad física, la salud, la seguridad social, y la alimentación equilibrada, las cifras parecen indicar lo contrario”.
“En el año 2017, en el país murieron 321 niños por desnutrición. Lo que en promedio significa que un niño muere diariamente. Según el defensor Carlos Negret ningún departamento del país se salva de la cifra”.
“Otra problemática que llama la atención de las autoridades está relacionada con el trabajo y la explotación infantil. En Colombia, según el Dane, hay 869.000 niños y adolescentes entre los 5 y 17 años trabajando”.
“Las ciudades con mayor tasa de explotación infantil son Neiva, Sincelejo, Pasto, Armenia y Cali. La mayor parte del trabajo infantil se concentra en el rango entre 15 y 17 años, con 18 por ciento, frente al 3,9 por ciento que se registró para el rango entre 5 y 14 años”.
“En el informe ‘La niñez no da espera - una mirada a su situación desde la sociedad civil’, en materia de educación, la tasa de permanencia escolar en la zona urbana es de 82%, mientras que este indicador presenta un fuerte rezago en la zona rural, donde la tasa solo llega a 48%”.
“De las 8.270.812 víctimas del conflicto armado, 29 por ciento (2.382.086) son menores de 18 años, de ellos 96,4 por ciento ha sufrido desplazamiento y sólo 0,3 por ciento ha retornado a su lugar de origen, entre otros”.
Se necesitan más lugares como bibliotecas, ludotecas, espacios recreativos, entre otros. La Unesco afirma que la actividad del juego es vital, puesto que condiciona un desarrollo armonioso del cuerpo, la inteligencia y la afectividad. Es tan preponderante que se diría que es la razón de ser de la infancia”, sostiene la organización. “Los niños que juegan tienen mejor autoestima, motricidad y capacidad de abstracción. Además, son menos propensos a desarrollar diabetes, enfermedades cardiovasculares u obesidad”.
Nuestros próximos mandatarios tienen la palabra en materia tan delicada como lo es la niñez. Colombia y los diferentes departamentos y municipios deben acoger lo establecido en las políticas internacionales que priorizan la atención y el buen trato a la niñez. En lo referente al departamento de Nariño y al municipio de Pasto es, como se expresó, preocupante que nuestros candidatos se rajen, que no alcancen siquiera aun promedio nacional, que sus preocupaciones se encuentren muy distantes de nuestros niños. Nos unimos a NiñezYa en su llamado para que en la agenda de nuestros gobernantes se visibilice al niño mediante la concreción de políticas que nos permitan expresar realmente que los niños son importantes para Colombia.