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Si el tema de conversación son los calzones de abuela, es imposible no mencionar la ropa interior de Bridget Jones.
Ella, con su naturalidad y espontaneidad, consideraba que este tipo de prenda era lo mejor para esconder esos kilitos de más, y para su suerte, sus galanes creían que eran de lo más sexy, por más irónico que parezca.
Un artículo publicado ayer en el New York Times habla justamente de esto; la nueva tendencia a la que algunas mujeres se han unido se trata usar y elegir ropa interior "de abuela", o sea, grande y cómoda.
Al contrario de lo que pasaba en la década de los 2000, años en que las tangas y los colaless eran ítems que no podían faltar en los cajones de ninguna mujer, ahora, la ropa interior más grande es la opción perfecta para algunas chicas.
No tiene que ver con la talla o con el peso, sino que con los gustos y preferencias. Pareciera ser que las nuevas generaciones no están interesadas en usar ropa interior incómoda, o también, que la influencia de lo vintage ha marcado las prendas íntimas.