La llegada de nuevas generaciones de compradores, el auge de tecnologías altamente avanzadas y la digitalización de la sociedad, están cambiando el paradigma de comportamiento de los clientes y la manera en la que se relacionan e interactúan con las compañías.
Los consumidores se están volviendo cada vez más amigables, ya sea interactuando a través de tecnologías de voz, como Alexa, o de herramientas de realidad virtual con avatares personalizados.
Las experiencias con Inteligencias Artificiales generativas se están viendo cada vez más amigables, apoyándose en ellas para la resolución de dudas, o beneficiándose indirectamente con recomendaciones personalizadas o experiencias ad-hoc.
Sin embargo, como lo indica el World Economic Forum, “la tecnología no es un sustituto de los humanos, es un transformador de las tareas, empleos y capacidades que los humanos realizamos.” Por lo tanto, adaptarse a esta nueva situación en los servicios de Customer Care, va a requerir dos factores fundamentales e indispensables: tecnología y personas.
En este sentido, Cesar López, presidente para Iberia y Latam en Covisian, compañía high-tech especializada en la prestación de servicios y productos tecnológicos para Customer eXperience “el contact center del futuro precisa de gestores de interacciones expertos, con una gran especialización en el sector en el que se presta el servicio, pero también con capacidad de resolución de problemas, de explotación de tecnologías y, sobre todo, de gestión de las emociones”
Así, mientras el asesor experto se centra en identificar la necesidad del cliente, gestionar la frustración que el problema le ha provocado y ofrecerle la mejor solución personalizada y concreta, la tecnología trabajará por detrás para realizar todo lo demás.
De esta manera, la tecnología permitirá al experto tomar decisiones más informadas de una manera ágil, gestionar varias conversaciones a la vez y ofrecer soluciones más rápidas a los clientes.
Es decir, nos estamos enfrentando a una evolución, no sólo de las interacciones, sino del modelo de gestión de los clientes, donde el tándem personas-tecnología aportará en la fidelización y satisfacción de los clientes.
“Por lo tanto, la atención al cliente en el futuro, será un nido de tecnologías de innovación, (I.A., Big Data, realidad virtual, etc.) implementadas bajo un nuevo modelo en el que las personas se transforman en expertos en clientes con especialización en los diferentes sectores” aseguró el directivo.