Por : Luis Horgelys Brito Ariza, Abogado defensor de los SPD, Activista social y veedor ciudadano .
Recientemente, el alcalde de San Juan del César, Enrique Camilo Urbina, ha sido nominado como el mejor alcalde de La Guajira, premios otorgados por café & politica, reconocimiento que en principio, podría parecer positivo. Sin embargo, al observar la situación crítica que enfrentamos en nuestro municipio, es lamentable que este tipo de premios se otorguen en medio del descontento y la ineficacia en la gestión pública.
La realidad es que, hace aproximadamente una semana, denuncié públicamente el colapso del sistema del alcantarillado del corregimiento de los pondores jurisdicción de San Juan del César. Esta situación, que pone en riesgo la salud y el bienestar de nuestra comunidad, es solo un ejemplo del estado precario de los servicios públicos domiciliarios en nuestro municipio y que decir del pésimo servicio que presta la empresa veolia. A pesar de las alarmas levantadas y las advertencias sobre la inoperancia de las estructuras gubernamentales locales, los problemas persisten y hacen eco en el clamor de los ciudadanos.
Es triste ver que mientras los habitantes de San Juan del César padecen la falta de soluciones efectivas y la inacción de quienes deberían velar por el bienestar público, se otorguen distinciones que parecen ignorar la realidad palpable que vivimos a diario. Este fenómeno de premiar a quienes deberían rendir cuentas es, sin lugar a dudas, un reflejo de anarquismo político y una falta de compromiso genuino con el desarrollo social y económico de la región.
No se trata aquí de desmerecer esfuerzos individuales, pues reconozco que cada alcalde tiene sus desafíos. Sin embargo, es fundamental que las premiaciones y reconocimientos se basen en logros reales y tangibles, y no en discursos sofistas que intentan disfrazar una situación crítica. En un entorno donde las promesas no se cumplen y los problemas se agravan, hablar de ‘mejores alcaldes’ se convierte en un insulto a la inteligencia colectiva de quienes estamos padeciendo la falta de acción y respuestas efectivas.
Es un llamado urgente a la reflexión para que las autoridades estratégicas de nuestra región reconsideren cómo y en base a qué criterios se otorgan estos premios. La realidad nos exige un cambio de rumbo: necesitamos un compromiso auténtico con el bienestar de la población y obras que aseguren un futuro digno para todos.
Como defensor de los servicios públicos Domicialiros, veedor cuidando y activista social, insto a nuestros ciudadanos y colegas a permanecer vigilantes, a exigir respuestas y soluciones concretas. No podemos permitir que el populismo y el demagogismo enmascaren las necesidades y sufrimientos de nuestra gente. Debemos trabajar juntos para construir un San Juan del César donde las acciones de nuestros líderes sean reflejo de la confianza que habíamos depositado en ellos.
Es momento de desvirtuar la falsa realidad que se presenta en ocasiones, y de accionar para que se cumplan las promesas que nos hacen. La comunidad merece más y se debe seguir luchando por un futuro mejor.
Luis Horgelys Brito Ariza
Abogado y activista social, Defensor de los servicios públicos domiciliarios y los derechos de la ciudadanía.