Fuentes ligadas a la causa deslizaron que habrían confesado el hecho, que se secuestraron prendas íntimas con sangre e incluso que en los primeros minutos de hoy se habría hallado el arma homicida
El sospechoso habría manifestado, además, que había ocultado una prenda íntima suya, porque tenía una mancha de sangre. La prenda fue secuestrada y los restos de sangre habrían sido cotejados en un laboratorios bioquímico móvil que la Policía trasladó a Quimilí.
La investigación concluyó ayer que Mario Agustín Salto había muerto por estrangulamiento, con un alambre del denominado “San Martín”, muy común para alambrar campos. Así también determinaron que los cortes para desmembrar el cuerpo del niño fueron hechos con mucha precisión, por lo que estiman que se trata de alguien acostumbrado a la faena de animales.
uno de los detenidos confesó el crimen, en tanto que los demás reconocieron su participación en el hecho.
Este sería un empleado de una pollería. La policía se trasladó hasta el lugar. Apenas los agentes ingresaron, el sospechoso habría comenzado a pedir que no lo mataran y confesado haber participado del crimen.
Otro dato relevante es que en el cuerpo del niño, a pesar de haber sido lavado por el o los homicidas, se encontraron restos de ADN de al menos dos personas. Las muestras son cotejadas para ver si coinciden que el de los detenidos.