La maravillosa experiencia de ir a Marte no será del todo positiva, porque según estudios realizados, el cerebro puede sufrir importantes daños durante el viaje.
(Muy Interesante) El reto de llevar personas a Marte, que la NASA y algunas empresas privadas pretenden relanzar a partir de 2030, es una de las aventuras más portentosas de la humanidad, pero conlleva múltiples riesgos, algunos de ellos inesperados hasta ahora para los científicos.
Según un estudio llevado a cabo por investigadores de la Universidad de California Irvine (UCI), los efectos de la radiación de partículas provenientes del espacio durante el trayecto sobre el cerebro humano pueden ser mayores de lo que se pensaba. Ya un estudio publicado en la revista Science sostenía que la exposición acumulada para un astronauta solo durante el viaje de ida y vuelta, sin contar con la estancia más o menos prolongada en el Planeta Rojo, sería equivalente a hacerse 33.000 radiografías. El nuevo trabajo de la UCI es aún más alarmista y prevé que los astronautas que vayan a Marte podrían sufrir demencia crónica, hasta el punto de que cabe que al volver ni se acuerden del viaje.
La investigación, publicada en Scientic Reports, describe el análisis con roedores realizado por el profesor de oncología radiactiva en la Escuela de Medicina de la UCI Charles Limoli. Según sus cálculos, la exposición a partículas cargadas de alta energía como las de los rayos cósmicos que bombardean a los astronautas durante los vuelos espaciales prolongados causan importantes daños cerebrales a largo plazo y producen alteraciones cognitivas y demencia.
Además, la radiación afectaba a la supresión del miedo, un proceso por el cual el cerebro elimina asociaciones desagradables y estresantes, lo que hace a los sujetos más propensos a la ansiedad. Este tipo de disfunciones cognitivas se dan también en pacientes con cáncer cerebral que han recibido altas dosis de fotones en tratamientos de radioterapia.
El problema que plantea a este nivel una misión a Marte es que requiere mucho tiempo, lo que propiciaría el desarrollo de estos trastornos cognitivos. Este estudio plantea la necesidad de investigar y buscar soluciones para mitigar los efectos en las futuras misiones a Marte, como más zonas de blindaje en el interior de la nave o tratamientos farmacológicos preventivos.
Aún así, ¿te arriesgarías a vivir esta experiencia?
Fuente: www.muyinteresante.es