Un estudio realizado por dos profesores de la Universidad de Colorado afirma que el uso del color rojo para realizar correcciones impacta de forma negativa en la relación entre estudiantes y profesores, lo que se traduce en menos aprendizaje.
Según el estudio publicado en The Social Science Journal, el color rojo es percibido como agresivo, lo que puede generar ansiedad en los estudiantes.
Los profesores Richard L. Dukes y Heather Albanesi, del Departamento de Sociología de la universidad, llegaron a dicha conclusión tras realizar un examen a 1.999 estudiantes, a los que se les entregaron cuatro versiones distintas de un ensayo ya calificado por un instructor desconocido.
A los estudiantes se les pidió que leyeran el ensayo y las correcciones del instructor y que sugirieran una calificación que le darían al ensayo. También se les pidió que explicaran como se sentían con las correcciones hechas por el instructor.
Luego de terminar de escribir su opinión, se les pidió responder un cuestionario para que los profesores pudieran obtener resultados más concretos del estudio.
Al analizar los resultados se encontró que los estudiantes no tomaron en cuenta el color de la pluma si estaban de acuerdo con las observaciones escritas por el instructor.
Sin embargo, cuando estuvieron en desacuerdo con las observaciones, las realizadas con color rojo fueron vistas como más duras, algo que, según los investigadores, podría ser similar a escribir con mayúsculas o gritar.
Debido a que esto no promueve un buen proceso de aprendizaje, según los profesores, los maestros deben de dejar de usar plumas con tinta roja y utilizar una de un color neutro.
Fuente: cnnespanol.cnn.com