La obra más célebre del repertorio clásico regresa al Argentino en una aggiornada versión Mario Galizzi
El Lago de los Cisnes , el clásico de los clásicos dentro del universo de la danza, regresará este fin de semana al Teatro Argentino, en una aggiornada versión del reconocido coreógrafo Mario Galizzi -a cargo también de la dirección del Ballet Estable-, basada en los pasos originales de Marius Petipa y Lev Ivanov. La bella música de Piotr Illich Tchaikovsky será ejecutada por la Orquesta Estable del primer coliseo bonaerense conducida, en esta oportunidad, por Darío Domínguez Xodo.
La palabra aggiornar , aclaró Galizzi en diálogo con EL DIA, no significa modernizar . En este sentido, dejó en claro que a la hora de reponer cualquier clásico su misión como coreógrafo se basa en el respeto. Ha sido un legado de paso en paso para nosotros y tenemos que valorarlo y tratar de respetarlo para que no se pierda. Hay que mantener la esencia y no desvirtuar lo que ha sido tan bien hecho porque por algo trasciende en el repertorio con los años , destacó.
En relación a la versión que se estrenará el sábado a las 20.30 en la Sala Alberto Ginastera -y que ha sido presentada con gran éxito en el Teatro Colón con los primeros bailarines Paloma Herrera y Guillaume C té y también en el Argentino con los protagónicos de Marianela Núñez y Maximiliano Guerra-, Galizzi anticipó que su desafío estuvo puesto en poder recortar aquellos pasajes superfluos que no hacen mella en la historia.
MANTENER LA ESENCIA
Ir al teatro, hace más de 100 años, se vivía más como una cosa social. Entre acto y acto, la gente se encontraba, saludaba y conversaba. Entonces, en aquella época, los ballets eran muy largos, con divertisment, y muchos entreactos que hacían alargar la historia. Y ahora la época ha cambiado, todo es diferente, incluso hasta el problema de seguridad influye porque la gente no quiere salir tarde del teatro. Entonces, el desafío es aggiornar para que la esencia de la obra esté completa pero anulando ciertos pasajes, a los que yo llamo adornos , pudiendo condensar el relato del bien y el mal en una versión muy simple, agradable y soportable en cuanto a las horas dentro de una sala , manifestó.
En esta misma línea, el coreógrafo detalló que no ha reducido los cuatro actos sino que, en una decisión basada en hacer más light la velada, optó por unirlos. Entre primero y segundo, un entreacto, y después el tercero y el cuarto juntos. Es un desafío tremendo porque, en este caso, los bailarines tienen que estar listos, sin descanso, para continuar con la historia, y también hay cambios escenográficos a la vista, sin cerrar telón; lo que se traduce en un gran esfuerzo de parte de todo el teatro, tanto del cuerpo de baile como de todos los técnicos para estar a la altura de las circunstancias .
Por último, consultado acerca de las cualidades de este ballet, el más aclamado de todos los tiempos, Galizzi rescató su encanto y su poder para transmitir sensaciones y emociones de las más bonitas. La gente, incluso en momentos de crisis económicas o espirituales, acude a ver una obra así porque lo saca un poco de la realidad. Este ballet, como la gran mayoría, trata sobre la lucha entre el bien y el mal, aún mas allá de la muerte. Creo que el ser humano siempre está buscando esa cosa de sentir que no todo está perdido. Con Lago podemos dejar afuera bocinazos y malos tratos porque cuando se cierran las puertas uno es transportado a dos horas de paz, como un bálsamo. Y eso es una cosa muy importante en la danza porque allí la gente ve cómo se cumplen los sueños del triunfo del bien. Hay belleza a pesar de todo lo que sucede en el mundo y ubica a los espectadores en una realidad diferente .
Fuente: www.eldia.com.ar