No cenar y eliminar alimentos como el pan son algunos de los errores que cometen personas sanas que deciden ponerse a dieta por su cuenta.
La presidenta del Colegio Oficial de Dietistas-Nutricionistas de Navarra, Arantza Ruiz de las Heras, apunta los errores más habituales que se suelen cometer en las dietas "caseras".
1. No cenar adelgaza. "Primero, la cena no engorda, engordamos nosotros. Y segundo la cena engorda según lo que se cene. Lo que pasa es que después no hacemos actividad física, por lo que las calorías de la cena son calorías que no se gastan tan fácil como las de la comida". La dietista afirma que una regla de oro es no saltarse ninguna de las 5 comidas aconsejables. "Si te saltas una comida llegas a la siguiente con más hambre, comes más deprisa y no se controla tanto qué se come".
2. Comer rápido engorda. "No engordas más por comer más rápido. Engordas según cuánto comes. En el hipotálamo tenemos en centro del hambre y la saciedad. Este centro detecta el nivel de glucemia (azúcar) en sangre. Si se come rápido no da tiempo a que el azúcar de la comida llegue a la sangre y, a su vez, a este centro. Sin embargo, si se mastica muy bien, se da tiempo a salivar los alimentos, la saciedad llega antes. Habría que dedicar a la comida unos 30 minutos".
3. Eliminar la pasta, el arroz y las legumbres."Es muy habitual que la gente elimine o reduzca estos alimentos básicos. El problema es que los tomamos con queso, panceta, chorizo, salsa de tomate comprada, etc. No hay que prescindir de ellos, hay que hacerlos salteados con ajetes, gambas o champiñones o con una salsa de tomate de natural". Es más, una idea que debe ir calando en la población es que las legumbres pueden ser un estupendo segundo plato. La recomendación es tomar entre dos y cuatro veces a la semana legumbres. Si se toman de primero y de segundo carne, hay un exceso protéico. ¿por qué no tomar una ensalada de primero y las legumbres de segundo?"
4. El pan, desterrado."Es un error de base, uno de nuestros caballos de batalla. Hay que desmitificarlo. Cien gramos de pan aportan 250 kilocalorías. Para hacer una idea, un bollo de pan como el que nos ponen en el restaurante son 40 gramos, 100 kilocalorías cuando una dieta para hacer en casa no debe bajar de 1.500 kilocalorías al día. En las dietas profesionales lo que se hace es controlarlo o sustituirlo por el tostado porque con él es más complicado hacerse un bocadillo o untar".
5. La lechuga por la noche retiene líquidos. "La lechuga es un alimento diurético, que ayuda a eliminar agua del organismo. Los alimentos diuréticos son los que contienen bastante agua y potasio, que también es diurético. Por tanto, todo lo contrario a retener líquidos".
6. No beber agua en las comidas. "El agua tiene cero calorías, la bebas cuando la bebas, antes, durante o después de las comidas. Hay quien viene diciendo que el agua diluye los jugos gástricos y se hace peor la digestión. Totalmente falso. Lo que sí es cierto que si bebes agua antes de comer ayudas a tener sensación de saciedad. Lo recomendable es tomar litro y medio de agua al día, independientemente del agua que contienen los alimentos que ingerimos. Esto que es tan fácil cuesta mucho porque hay gente a la que no le gusta el agua. En ese caso, se puede echar un poco de gaseosa o un poco de zumo de limón".
7. Frutas sí, pero ni plátano ni uvas ni aguacate. "Es cierto que son frutas más calóricas, pero volvemos a que todo depende de la cantidad. Con moderación se pueden tomar perfectamente. Es la regla de oro: no prescindir de ningún alimento".
8. Aceite, mejor de oliva."Con la gran promoción que se ha hecho de esta aceite la gente se piensa que es tan bueno que no va engordar. Y no es aceite. Todos los aceites son muy calóricos. Lo aconsejable es tomar al día entre tres y seis cucharadas soperas de aceite".
9. Adelgazar cuesta igual con 20 que con 50 años. "Normalmente cuesta más bajar kilos cuanta más edad se tiene. El organismo está formado por agua, músculo y grasa. Conforme te haces mayor se cambia parte de músculo por grasa. Además, el cuerpo tiene efecto memoria. Si a lo largo de la vida se han hecho dietas que se han abandonado al poco tiempo, el cuerpo lo que hace es pedir más alimento por si vuelven las restricciones. Es lo que se llama efecto rebote".
Fuente: www.diariodenavarra.es