Las épocas cambian, sobrellevar los gastos diarios es cada vez más difícil: las prioridades en cada estilo de vida son distintas y es que en en los últimos años se ha vuelto mas frecuente ver parejas bien consolidadas, sin hijos y el motivo del que más se habla es sobre que esta generación prefiere mascotas antes que la progenie, pero ¿es esa la razón absoluta?
De acuerdo a un informe presentado recientemente en la Cumbre Social Europea, se afirma que las nuevas generaciones están teniendo menos oportunidades que las anteriores. A esto se suma el hecho de que viven peor que sus padres, e incluso que sus abuelos en algunos casos y la independencia es apenas una meta latente a realizar.
Ahora bien, ¿qué son los sinkies? Se trata de jóvenes que viven en pareja, pero que han descartado la opción de tener hijos. No porque no deseen descendencia, simplemente sucede que, al juntar ambos sueldos, apenas son capaces de subsistir.
El término de sinkies ha sido acuñado por Cáritas Europa, quien es la encargada de llevar un estudio a través de 17 países de la Unión para investigar el fenómeno y dar con formas de detenerlo.
La palabra Sinkies se puede tomar como un acrónimo de una conjunción de vocablos ingleses: Single, Income, No Kids. O sea, solteros con ingresos, pero sin hijos, y no necesariamente por voluntad propia, más bien por necesidad u obligación debido a las circunstancias.
Este fenómeno social, afecta a tres de cada diez jóvenes europeos de acuerdo al estudio. Es decir, miles de personas entre 20 y 30 años se encuentran en grave riesgo de esta exclusión social pese a contar con un trabajo.
Los sinkies son todo lo contrario a los dinkies. Las parejas de los 80 ganaban mucho dinero y elegían no tener hijos; las de hoy no llegan a fin de mes y no se pueden ni plantear formar una familia aunque quisieran.
Según un estudio, en el Reino Unido, los jóvenes millenials entre 21 y 30 años llevan una media de 5 años sin tener un aumento en sus ingresos, pero sí se ven obligados a luchar con una elevada inflación. Es decir, cada día son más pobres objetivamente hablando.
Casos como los de Grecia y Portugal son especialmente graves, ya que miles de jóvenes con estudios universitarios apenas pueden acceder a trabajos irrelevantes y mal pagados.
Y en este momento de precariedad, se ven obligados a navegar los sinkies, que prueban a luchar contra su frustración laboral emigrando y buscando en otros lugares oportunidades que no encuentran cerca de su hogar.
Fuentes:
Simona Ichariba
Europa Press
Muhimu
Fuente: www.bioguia.com