En estos días de tanto calor pasamos horas y horas dando vueltas en la cama, intentando conciliar el sueño. A un 25% de la población española le afectan las altas temperaturas a la hora de dormir. Al calor se suman factores como la pérdida de rutina o el hecho de que el sol salga antes, que elevan el porcentaje de población que padece insomnio veraniego al 40%.
Estos son algunos trucos que os pueden ayudar a hacer la noches más llevaderas y conseguir descansar en verano:
Tomarse una ducha con agua tibia antes de ir a dormir
La rumorología siempre ha recomendado que lo mejor para dormir en verano, es tomarse una ducha de agua fría antes de acostarse. Pero en realidad, este consejo es contraproducente para conciliar el sueño. El contacto del agua fría con el cuerpo tiene un efecto contrario, ya que nuestra temperatura corporal se eleva para contrarrestar la temperatura del agua. Además, en lugar de relajarnos, despertamos todo el cuerpo y nos costará mucho más dormirnos. Por el contrario, si lo hacemos con una temperatura tibia o medio fría nos relajará y nuestra temperatura bajará. Ideal para ir a dormir.
Mojar los pies y manos
Si no queremos ducharnos, podemos mojar solo las manos o los pies con agua tibia. Estas partes de nuestro cuerpo son las que más tiende a calentarse. Mojar esta parte nos ayudará a aliviar el calor.
Coloca tus sábanas y almohadas al congelador
30 minutos antes de irte a dormir pon las sábanas y fundas de las almohadas en el congelador. Así conseguirás que cuando te pongas a dormir estén frescas durante alrededor de 40 minutos, un tiempo suficiente para conseguir un sueño profundo. Sin embargo, nunca deben de estar mojadas ya que esto seria contraproducente. Si usáramos algo mojado solo conseguiríamos que hubiera humedad densa en la habitación. Causaría el efecto contrario y nos costaría mucho más dormirnos.
Comida picante
Sí, no nos hemos vuelto locos. Comer comida picante es el método perfecto para refrescarse antes de irse a dormir. Este tipo de alimentación estimula la sudoración y hace que el cuerpo pierda calor. Si no te gusta la comida picante, te recomendamos que tomes algo refrescante, como por ejemplo una ensalada. Además, es mejor no comer mucha cantidad durante la cena y hacerlo dos horas antes de acostarte. Así, le das tiempo al cuerpo a digerir la comida y evitas que trabaje mientras intentas dormir.
Dormir lo más cerca del suelo posible
Cuanto más cerca del suelo duremas más fresco estarás. El aire caliente sube, así que el aire frío se queda abajo. Normalmente, las plantas bajas están un par de grados por debajo de las superiores. Por lo tanto, si puedes, durante la época de verano cambia tu cama al sótano si lo tienes, este es sin duda lugar más fresco de la casa sin duda.
Usar un pijama de algodón
A veces si tenemos mucho calor terminamos durmiendo desnudos, pensando que esto nos evitará sentir calor. Todo lo contrario. Ir desnudo no permite que la humedad se evapore entre tu cuerpo y donde duermas. Si lo haces con un pijama de algodón este evitarán la sudoración excesiva. Otro tipo de tejido, como la seda, provoca aún más sudor.
Saca tus pies fuera de la sábana
Como hemos dicho anteriormente, los pies son una de las partes del cuerpo que más se calientan. Si te gusta dormir tapado, aunque tengas calor, te recomendamos que utilices este truco. Descubriendo tus pies conseguirás tenerlos más fríos durante la noche, y sentirás menos calor en todo el cuerpo.
Dormir hacia un lado
Está es la mejor postura para dormir, porque es la fórmula en la que el cuerpo tiene menos contacto con la cama, que es el causante de producir calor. ¿Cuántas veces no puedes dormir y te pones a dar vueltas por la cama? Antes de hacer esto, es recomendable irte a dar una vuelta. Si vas de un lado a otro la cama, esta terminará absorbiendo el calor de tu cuerpo y acabará toda la cama sudada. Es recomendable evitar dormir bocabajo y no utilizar almohadas.
No hacer actividad física antes de ir a dormir
Hacerlo conlleva un aumento de la temperatura interna, por eso es recomendable no hacer ejercicio un mínimo de tres horas antes de irse a dormir. Siempre se ha dicho que si haces deporte durante la noche después puedes descansar mucho mejor, pero en realidad cuando ejercitas tu cuerpo generas una falsa sensación de sueño, que solo es cansancio. Aparte, el ejercicio genera morfinas que provocan estar aún más despierto.
Abrir las ventanas
Es recomendable abrir las ventanas de tu habitación una hora antes de acostarte. Así aumenta la circulación del aire y se enfriará el cuarto. Es mejor dormir con las ventanas cerradas, ya que mientras descansas tu temperatura corporal desciende, y por el otro lado la temperatura de fuera de la habitación también es más baja. Con las ventanas abiertas por la noche los músculos se pueden tensar y hasta puedes resfriarte. Durante el día es mejor tener las persianas y ventanas cerradas para que no se caliente la habitación.