Según la profesora de psicología de la Universidad de Auckland, Yuthika Girme, el no sentir el deseo de una relación implica no sufrir la soledad de la soltería y eso es bueno, aunque evitar siempre los conflictos no es algo positivo.
En este estudio se analizó a 4.000 estudiantes universitarios y se encontró que lo que determinaba la felicidad de una persona no era su estado civil sino los objetivos para una relación.
Además se identificaron claramente dos grupos, los que tenían metas, o sea, las personas que desean realmente tener una relación y las personas que las quieren evitar, o sea, aquellas que desean esquivar el conflicto y el drama.
El estudio demostró que ninguno de los dos grupos es mejor que el otro.
Para la profesora Girme, tener metas muy altas en las relaciones puede significar tener relaciones de mejor calidad, aunque también puede hacer que tengas que enfrentar más drama y encontrar las rupturas mucho más dolorosas.
Según la investigación, lo importante es que nos aceptemos como somos y si alguien tiene el deseo de evitar crecer como pareja o simplemente estar soltera, tendrá que hacer los ajustes necesarios para su felicidad y la de su pareja.
Hay que aclararle a los que están en parejas que los conflictos son inevitables, y que lidiar con ellos puede mejorar la calidad de la relación. Mientras que las personas solteras, que no tienen un deseo de crecer acompañados pueden tener una vida llena de felicidad y logros.
Estar soltero significa que uno puede concentrarte en sí mismo, en sus aspiraciones personales y metas. Por eso es fundamental pensar en lo que realmente hace feliz a cada individuo.
Hay que aceptar que si uno tiene en mete lograr nuevas cosas, lo mejor es disfrutar de la soltería, enfocarse en las metas personales y no centrar la vida en el amor de pareja.
Fuente: la100.cienradios.com