El ayuntamiento de Toronto decidió la prohibición de todas las ventas de agua embotellada en su territorio. Ésta es una más de las medidas del ayuntamiento de Toronto para conseguir disminuir en un 70% la cantidad de residuos de su vertedero municipal.
Además el plan incluye otras medidas como un sobrecargo de 5 cent. por cada bolsa de plástico o la sustitución de las bolsas de plástico por sacos de papel reciclado. La ciudad canadiense es la primera en prohibir la venta y distribución de agua embotellada.
La ciudad de San Francisco se convirtió en el 2014 en la primera ciudad en prohibir la venta de agua embotellada en propiedad pública, la decisión tomó nueve meses. Estiman que la medida afectará a vendedores en parques, camiones de comida, ferias locales y centros de convenciones. Se hacen excepciones si no hay fuentes de agua en la cercanía.
Medidas similares ya se habían tomado en los parques nacionales de E.U.A y en algunas universidades. Se trata de reducir los desechos plásticos del país. “No fue sino hasta la década de los noventa que la industria del agua embotellada —que ahora vale $60 mil millones dólares— creció enormemente gracias la mercadotecnia en masa y campañas de distribución. Esta legislación es un manera mucho más activa de reducir el desperdicio de botellas de plástico.”
Fuente: www.creadess.org