Probablemente todos tenemos en cuenta que los sentidos son las puertas para llegar al corazón de los demás, nos gusta oler y vernos bien para atraer al género de nuestra preferencia por lo que recurrimos a productos sintéticos que "realzan" la belleza natural, y con ello, gastamos muchísimo muchísimo dinero que pudiese llegar a ser innecesario entre perfumes y maquillaje, por ejemplo.
Sin embargo, no tomamos en cuenta que la piel tiene un aroma particular, cada persona tiene un olor natural totalmente único, razón por la cual las mascotas reconocen fácilmente a sus dueños. La epidermis humana emite cientos de sustancias químicas conocidas como compuestos orgánicos volátiles, muchos de los cuales desprenden una fragancia. Y esa esencia tiene un rol crucial al momento de la seducción.
Por ejemplo, un estudio del Instituto Karolinska de Estocolmo, Suecia, reveló que el olor de las hormonas sexuales presentes en el sudor, llamadas feromonas, generan una respuesta en la parte de su cerebro involucrada en la actividad sexual en el otro.
¿Cómo se puede convertir el aroma natural de la piel en un estimulante para seducir?
Un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Macquarie, en Australia, sostiene que las mujeres encuentran más atractivo el olor de los hombres que comen más frutas y verduras. Los investigadores realizaron un experimento en el que utilizaron un espectofotómetro, un aparato que usa la luz para detectar en la piel la presencia de carotenoides. Así, encontraron que los voluntarios que consumían muchas frutas tenían en su piel los pigmentos responsables del color de las naranjas y los limones, aunque estos son imperceptibles para el ojo humano.
Luego, les pidieron a los voluntarios que hiciesen ejercicio intenso hasta comenzar a sudar para de manera posterior pedirle a un grupo de mujeres que oliesen ese sudor y emitieran un veredicto, a favor o en contra.
Los resultados fueron contundentes a favor de los hombres que comían mucha fruta y verduras. Por el contrario, el aroma que desprendían los hombres que consumían muchos carbohidratos les producía rechazo. En un lugar intermedio estuvieron aquellos que comían mucha carne que si bien no fueron catalogados como “desagradable”, si era más intenso que lo que tenían una dieta más verde.
Fuente: atodomomento.com