uponer que la inteligencia artificial no viene desde sus orígenes envenenada, es bastante tóxico, peligroso y mortal, ante lo tendencioso que implican y significan sus fundamentos artificiosos, motivados y creados para dominar criaturas dispuestas a entregar sus inteligencias naturales sin luchar, con tal de obtener a cambio minucias de los rendimientos provocados por las basuras producidas al interior de industrias contaminantes del medio ambiente, y de los principios en los que se basa la existencia orgánica general, terminando desde entonces en medio de sociedades integradas y compuestas por seres convencidos que lo que hay que hacer es dejar de oponerse con fuerza y con locura al poder acumulativo de las riquezas terrenales, para que éstas queden en poder de pocos.