Los médicos del hospital de Changsha, en China, decidieron implantarle al joven Xiao Wei la mano derecha que perdió en un accidente laboral en su tobillo con la finalidad que se mantenga con irrigación sanguínea y así poder volvérsela a su sitio.
Tuvo que pasar un mes para que la fuera colocada en su lugar y aunque aún es necesaria otra cirugía, los médicos confían en que Xiao quedará en perfectas condiciones.
Con esto, el país asiático muestra una vez más sus grandes avances en la medicina pues este año también sorprendieron cuando cultivaron una nariz en la frente de un joven que había perdido su apéndice nasal por una infección tras un accidente de tránsito.
Fuente: www.americatv.com.pe