Cuando somos pequeños todos deseamos crecer lo mas rápido posible porque así nos acostaremos mas tarde, podríamos comer golosinas cuando queramos y conducir por fin nuestro coche, así como un sinfín de cosas que deseamos cuando somos chicos.
Pero cuando ya somos adultos empezamos a pensar a la inversa, es decir, cuando uno era pequeño. No teníamos tantas responsabilidades, ni exigencias, pero no siempre es así para todos los niños.
Un día un policía de Carolina del Sur en Estados Unidos recibió una llamada de teléfono de un jovencito de 13 años, pero nunca podría imaginar lo que le sucedería a continuación.
Cameron Simmons, de tan solo 13 años, estaba en un estado de preocupación cuando levanto el teléfono y marcó el numero de las autoridades. Al otro lado del teléfono contestó la llamada Gaetano Acerra quien acudió directamente a la casa de Cameron.
Ambos estuvieron sentados en las escaleras y hablaron tranquilamente, Cameron le decía al policía que iba a irse de casa porque su madre le gritó por jugar al videojuego de su hermano mayor sin que le dieran permiso.
El policía le dijo que había problemas mucho mas graves que este, según reporta el canal de televisión abc7news.
Gaetano le pidió al joven que le dejara ver el interior de la casa y al entrar su sorpresa fue que el pequeño no tenia nada en su habitación. No tenia ningún mueble y la ropa estaba en una bolsa negra de basura. El joven no disponía ni de una cama para poder dormir.
Cameron le contaba a Gaetano que su familia se tuvo que mudar porque debían cuidar de un pariente enfermo y habían sido unos meses muy duros.
El policía tenia el corazón en un puño a medida que Cameron le narraba como era su día a día en casa.
Su historia le conmovió por lo que decidió hacer algo que no tenia porque hacer y que estaba fuera de su cargo profesional.
Nadie de la familia de Cameron tenían idea de la gran sorpresa que Gaetano les estaba preparando.
Este policía estuvo varias semanas recolectando muebles y varios juguetes para la familia de esta manera toda la familia de Cameron podría vivir decentemente.
Gaetano reunió a su hermano para ayudarle y consiguieron dos escritorios, sillas, una cama y también una videoconsola para que jugaran.
Por fin los dos hermanos tenían una cama y muebles en su habitación para que pudieran estar juntos jugando.
Cameron no pudo aguantarse las lagrimas por lo que Gaetano había hecho por su familia. Y esta historia se difundió por todas las redes sociales, mostrando el gran corazón que tiene este gran agente de policía.