Todos alguna vez empleamos alcohol en gel (también conocido como gel antiséptico) para limpiarnos las manos. Indiscutiblemente, es una manera rápida de hacerlo en caso de no tener agua y jabón. Sin embargo, según una nueva investigación, el uso de alcohol en gel aumenta la permeabilidad de nuestra piel a sustancias nocivas para nuestro cuerpo.
El siguiente video (en inglés, pero subtitulado) explica en detalle los riesgos y los mecanismos por lo cuales este producto sería insalubre. Te recomiendo verlo ya que es sumamente breve pero informativo a la vez
Como bien todos sabemos, el exceso de higienización con productos que aseguran «eliminar el 99,9% de las bacterias» no es algo recomendable (ver artículo: «5 razones para no usar jabón antibacterial») debido a sus elevadas cantidades de triclosán, del cual tanto hemos advertido en varias otras publicaciones.
El triclosán es un compuesto antibacteriano y fungicida de gran eficacia, ¿entonces cuál es el problema? Que además de librarnos de las bacterias que nos pueden hacer daño, también nos deja sin las bacterias buenas que necesariamente debemos tener en nuestro sistema. Esto ya lo sabíamos, pero ahora también aprendimos que, al incrementar los niveles de bisfenol A, de hecho nos hace aún más vulnerables.
Este incremento afecta el funcionamiento y la regulación natural de nuestro sistema endócrino. Finalmente, todo puede desencadenar en problemas tales como el desorden hormonal, enfermedades del corazón, cáncer, infertilidad e incluso diabetes. El gran problema es que el uso de alcohol en gel hace más permeable la piel y facilita el ingreso del bisfenol A a nuestro organismo.
En definitiva, si no quieres tener ningún problema mantente a la vieja escuela: refregar con jabón y enjuagar.
Interesante, ¿no crees? ¿Seguirás empleando alcohol en gel luego de este descubrimiento?
Fuente: curiosidades.batanga.com