Una llaga que hace pus por donde quiera que se ponga el dedo. El caso de EMSSANAR ya es de vieja data y ha movido los hilos de muchas investigaciones sin que hasta el momento se tengan resultados concretos. Ha reinado la impunidad y las irregularidades han crecido de una forma angustiosa y alarmante.,
Tanto que una de las usuarias afectadas y proveniente de la ciudad de Cali tomó la determinación en recientes dias de coserse su boca en protesta por la pésima atención, negligencia médica y presuntos actos de corrupción que afectan la atención de los cientos de usuarios.
El VEEDOR ciudadano Jairo González preocupado por esta crítica situación se ha dado la tarea de escuchar las quejas y denuncias de muchos de los usuarios que se han visto privados de una atención médica oportuna. Comenta el caso de un joven a quien estuvieron a punto de amputarle una de sus piernas debido a negligencia administrativa que alegaba la no disponibilidad de recursos económicos para asumir el control de este paciente. Afortunadamente y gracias a su intervención se acude a una acción de tutela invocando una EMERGENCIA VITAL que permitió que un juez de la república ordene el tratamiento inmediato de la patología de este usuario de EMSSANAR.
Igualmente relata como una anciana de 87 años fue víctima de la falta de atención médica por asuntos meramente administrativos que aducen y se acogen a la falta de recursos para no brindar los tratamientos idoneos y oportunos a los usuarios de EMSSANAR.
Abundan casos y situaciones dolosas. Situación que obligó a una usuaria a coserse su boca como una medida extrema y urgente de protestar y llamar la atención de las entidades encargadas de velar por el bienestar de los usuarios del sistema de salud colombiano. La vida y la integridad de esta persona estuvo en riesgo inminente por cuanto adolece de delicadas enfermedades que se complicaron debido a la carencia de alimentos y de una óptima hidratación.
Pero, mientras esto ocurre con los cientos y miles de pacientes, el veedor ciudadano Jairo Gonzalez en un acto de valor y total empatia con los afectados, denuncia un despilfarro de dineros de la entidad que se encuentra intervenida y a la espera de una definición de su cierre definitivo o de la implementación de medidas que le permitan su continuidad.
Se pone en conocimiento de la opinión pública del departamento de Nariño de un oneroso contrato de la entidad de setecientos ochenta millones de pesos por concepto de asesoría jurídica por un término de escasos cuatro meses con una entidad cuestionada por conocedores del tema y que igualmente se trató en sesión especial del Concejo del municipio de Pasto.
Como si esto no fuera poco se recalca que esta entidad debe asumir con recursos propios el alto salario de su inverventor que sobrepasa los sesenta millones de pesos mensuales. Hecho reprochable debido a la manifiesta crisis de esta entidad y su consecuente ausencia de políticas que permitan asistencia y tratamientos adecuados a sus usuarios.
Voces como las del veedor ciudadano y líder cívico JAIRO GONZALEZ refrescan la memoria de una opinión pública que parece desfallecer ante sus propósitos de un atención digna y oportuna. Obligan a las entidades correspondientes a tomar las medidas correctivas y subsanar tanta desidia y negligencia. Les corresponde a los entes de control emitir un pronunciamiento serio, juicioso y tranquilizador para los miles de usuarios de EMSSANAR que han visto como muchos usuarios padecen los rigores de una intervención que se prolonga inexplicablemente mientras las irregularidades crecen y se multiplican.