Si ya no querés hacer más crucigramas porque siempre te falta una palabra para completarlos, no te preocupes, hay otra manera para que tu cerebro siga funcionando activamente. ¿Qué tenés que hacer? Nada de pensar, sólo consumir algunos alimentos que ayudan al buen desempeño de las funciones cognitivas.
Antes que nada, es primordial mantener una plan de alimentación equilibrado cubriendo todos los nutrientes que el organismo necesita. Y luego, focalizar en alimentos que sean ricos en ácidos grasos ya que estos se encuentran en nuestro sistema neuronal; en vitamina B, B1 y B12 ya que la carencia de estos suele generar una disminución de las funciones cerebrales; en Acetil L Carnitina que es un antioxidante que previene la oxidación de los lípidos cerebrales; en Glutamina, que proporciona oxígeno a las funciones vitales de nuestro organismo; en Fosfatidilerina que se encuentra en las membranas celulares y en Fosfatidilcolina que también es otro componentes que constituye dichas membranas.
¿En qué alimentos los encuentro?
En pescados, frutas secas, yemas de huevo, soja, carne, sesos, hígado, riñón, productos lácetos y vegetales entre muchos más. Como podemos apreciar, todos los nutrientes que necesitamos para que nuestro cerebro funcione activamente están presentes en los alimentos que habitualmente consumimos. El secreto: es acordarse de consumirlos equilibradamente, ayudándonos con una actividad física controlada y evitando el exceso de alcohol, tabaco y sustancias nocivas para el organismo.