Todos tenemos un amigo con un nombre exclusivo, glamoroso o exótico que deja a los demás sintiéndose bastante comunes. A veces la vida (o en este caso, los padres) no es justa. Pero tampoco es como si el nombre que te dan en tu nacimiento, marca el rumbo de tu vida ¿O sí?
Albert Mehrabian, profesor de psicología en la Universidad de California, cree que si: “Los nombres generan impresiones, como la apariencia. Pueden ser impresiones positivas o negativas”, dice. “Pero los nombres también pueden tener un impacto cuando no estamos presente físicamente, como en un CV”
Mahrabian investigó como son las primeras impresiones que cientos de nombres generan en distintas personas. Es increíble cuantas asociaciones positivas generan algunos nombres, y cuantas impresiones negativas causan otros. Muchos nombres se asocian con el éxito, lo que Mehrabian también llama ambición, inteligencia, confianza y otros atributos buenos a la hora de buscar trabajo.
Así que ¿Qué nombres tienen más posibilidades de conseguir el éxito? Según una investigación estadounidense, Alexander es un nombre 100% exitoso. William alcanza un 99% y John un 98%. Del lado femenino Jaqueline, Diana, Danielle y Catherine van a la cabeza.
¿Nuestro nombre puede afectar tanto nuestra vida? Pamela Satran, autora de libros sobre nombres de bebés, cree que no hay suficiente evidencia que una a los nombres con la potencia al éxito. Ella recuerda un estudio en particular: Un grupo de investigadores le dio a unos empleadores, dos curriculums idénticos, Un CV era de una chica llamada Lashanda, un nombre muy popular en la cultura afroamericana y el otro de Lauren, nombre asociado con la clase media blanca. En ese estudio, Lauren obtuvo 5 call backs más que Lashanda, pero en otra investigación las dos estuvieron parejas.
Angela Baron, del instituto Chartered, le da un vistazo negativo a los empleadores que toman decisiones basados en los nombres: “La gente juzga basada en pre-conceptos, pero no deberíamos reclutar personal con esa mentalidad. Los empleadores deberían concentrarse en las habilidades y la experiencia.”
Una profesora de secundaria del norte de Londres, cuenta que sus alumnos tienen actuales tienen nombres muy bizarros como Amba, Jordon, Charlee, Moniquia, Shaliqua y Sharday. ¿Podrían estos nombres afectar a los estudiantes cuando quieran conseguir trabajo? “Para mi pueden ser una desventaja seria”, dice la profe.
Sin embargo, Satran cree que no todo es tan blanco y negro: “La cultura de las celebridades y la diversidad étnica le dan valentía a las personas para nombrar a sus hijos con nombres más exóticos. Tener un nombre especial, te hace una persona especial.”
Por Agustina Dergarabedian.
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Fuente: expresionespontanea.wordpress.com
