El transporte público será gratuito mientras dure el buen tiempo y se mantengan los niveles de contaminación
A partir de este lunes, los vehículos con matrícula par tendrán prohibida la circulación en el centro del área metropolitana de París. En todo el perímetro definido, no podrán entrar los camiones de más de 3,5 toneladas, salvo los de la basura o los frigoríficos de aprovisionamiento alimentario. Solo se dejará salir sin restricciones a los vehículos limpios (eléctricos, híbridos o con propulsión de gas) pero también a los que -al margen del número de su matrícula- lleven al menos tres ocupantes, a los de servicios de urgencias, los taxis, los autocares y otros de transporte colectivo, así como los matriculados en el extranjero.
Para incitar a que los automovilistas dejen su automóvil en casa mientras dure esta situación, será gratuito el transporte público. Unos 700 policías vigilarán el cumplimiento de la llamada «circulación alterna» en París y en las otras 22 ciudades de la periferia donde se aplicará el mismo dispositivo, explicó el prefecto (delegado del Gobierno), Bernard Boucaud. Las infracciones a la norma pudieran castigarse con multas de 20 a 50 euros.
La influyente Asociación del Automóvil Club (ACA) ha protestado enérgicamente contra un plan que, a su modo de ver, «solo agravará los problemas de circulación, penalizando a las familias más modestas, engendrando costos económicos suplementarios». Según la ACA, el tráfico rodado solo representa un 18 % de las emisiones de partículas en la atmósfera, mientras que el 82 % de la polución parisina está provocado por la vivienda, la actividad industrial, la agricultura regional y el sector terciario.
Fuente: www.abc.es