Sólo en Estados Unidos mueren diario más de 2,150 personas debido a enfermedades cardiacas, lo que las hace la causa número uno de muerte tanto en hombres como en mujeres, de acuerdo con American Heart Association.
Algunos de los peores
Carne procesada: El ingrediente básico de los hot dogs y sándwiches está compuesto de altas cantidades de sodio, conservantes, grasas saturadas y muy poca proteína. Además hay estudios que han relacionado a la carne procesada con mayores riesgos de diabetes y cáncer de páncreas.
Carne roja: Dejar la carne procesada no significa abusar de las carnes rojas. Siguen teniendo altas cantidades de grasas saturadas. Mejor considéralas un premio en tu dieta. Si no estás dispuesto a dejar la carne por completo, al menos reduce su cantidad. Le harás un enorme beneficio a tu cuerpo y al medio ambiente.
Pizza: Sólo una rebanada puede contener hasta 2/3 partes del límite recomendado de grasas saturadas. Si de todos modos quieres comer pizza de vez en cuando, trata de evitar esa ración extra de queso y mejor pide vegetales en lugar de tocino y salami.
Grasas trans: Estos ácidos grasos se encuentran en la mayoría de la comida procesada para que duren más tiempo y porque son fáciles de producir. Sin embargo, las grasas trans aumentan el colesterol dañino y reducen el colesterol benéfico. Para evitarlos, busca los alimentos que tengan el sello de “libre de grasas trans”.
Alimentos fritos: Los restaurantes fríen una y otra vez los alimentos en el mismo aceite, que se vuelve más y más saturado. Y aunque no lo hicieran, los alimentos fritos como el pollo o las papas contienen una enorme cantidad de grasas. Trata de evitar estos alimentos, a menos que estén fritos con aceites vegetales como el de oliva.
Soda: “Cuando pensamos en enfermedades cardiacas, mucha gente lo asocial con colesterol y grasas, pero también sabemos que el azúcar está relacionado con la obesidad”, dice Cynthia Thaik, una cardióloga de Los Ángeles. De hecho, consumir una bebida azucarada a diario, además de todo el peso extra, conlleva a un 20% de mayor riesgo de sufrir un ataque cardiaco, de acuerdo con un estudio de 2012.
Por si fuera poco, beber refrescos de dieta incremente los riesgos de infartos, ataques y muerte, aunque la causa exacta aún no se termina de descubrir.
Fuente: www.culturizando.com