Al presidente no le gustan los organismos autónomos…tal fue la señal para que prohombres, lideres, voceros y en general la 4T anunciara la intención de extinguir al INE y ya entrados en gastos al TEPJF.
Y la furia en redes sociales fue desatada. Durante meses se denostó, difamo y se atacó a consejeros y a cada acto del INE se le coloco en la línea de la acidez critica.
La estrategia basada en la posibilidad de obtener mayoría calificada en el congreso le permitiría a la 4T desaparecer al INE; pero la realidad electoral aplasto la posibilidad, por ello la Secretaria de Gobernación, Olga Sánchez, lanzo una tenue red de reconciliación al decir que el INE hizo bien su trabajo. No se deshizo en elogios, pero con eso fue suficiente, para silenciar a la “manada”, y asegurar la sobrevivencia del Instituto Nacional Electoral.