¿Sabías que existe una correlación directa entre la incidencia de la artritis y una deficiencia de boro mineral en el cuerpo? ¡La investigación con respecto al boro mineral y su conexión con la artritis está empezando a ver la luz del día!
En un sorprendente descubrimiento, la investigación llevada a cabo por el Prof. Roger Wyburn-Mason (MD, PhD) identificó una ameba que parasita (infesta) las articulaciones de las personas con artritis reumatoide. “En 1975, en el IX Congreso Internacional de Quimioterapia, en Londres, Inglaterra, el difunto (1983) Roger Wybum-Mason (MD, MRCP, B. Chir., MA, Ph.D.) asombró al mundo de la medicina, anunciando que había encontrado un nuevo protozoario como causa de la enfermedad de reumatoide”.
Continuando con el trabajo del Prof. Wyburn-Mason, el Dr. Rex E. Newnham (PhD, DO y ND), un médico osteópata y naturópata autor de “Derrotando a la Artritis y a la Osteoporosis”. Lo que encontró fue increíble…
¡El Boro mató a las amebas que el Prof. Wyburn-Mason había identificado!
El Dr. Newnham también encontró un poco de evidencia relacionada con la correlación de la concentración de boro en ciertas áreas geográficas y el desarrollo no sólo de la artritis reumatoide, sino de la artritis común también. Él encontró que en determinadas zonas de Australia, donde el agua potable contenía altos niveles de boro, ¡no hubo incidencia de la artritis en los seres humanos y ni en los animales!
La incidencia de la artritis depende del boro
Curiosamente, la correlación entre la artritis y el boro se encuentra en otras áreas también.
El Dr. Newnham encontró que en Israel, donde el boro se encuentra en altas concentraciones en el suelo, la incidencia de la artritis era tan baja como 1-7%.
En comparación con los EE.UU., Nueva Zelanda y otras partes de Australia, donde la concentración de boro es moderada, la incidencia de la artritis es más alta; de 20 a 40%.
En contraste, las áreas tales como Jamaica, donde los niveles de boro son extremadamente pequeñas, la incidencia de la artritis es muy alta, alcanzando más de 70%.
En conclusión, la evidencia en todo el mundo está empezando a vincular la baja ingesta de boro con un aumento en los niveles de la artritis, una prueba de que la artritis es un síntoma de las deficiencias nutricionales y no simplemente un proceso “normal” de envejecimiento, como la industria médica nos quiere hacer creer.
¡¿Ahora no es esto interesante?!
Con millones de personas que sufren de artritis en los Estados Unidos solamente, tal vez es hora de empezar a dar al boro mineral un poco de atención, en lugar de sólo a los productos farmacéuticos para la supresión de los síntomas.
Los alimentos ricos en boro incluyen: almendras, nueces, aguacates, brócoli, papas, peras, ciruelas pasas, miel, naranjas, cebollas, garbanzos, zanahorias, frijoles, plátanos, uvas rojas, manzanas rojas y pasas.
Fuente: lamenteconectada.com