Rain es un joven cualquiera que, como todos los chicos de su edad, tiene que hacer frente a situaciones embarazosas que le hacen desear poder hacerse invisible en algún momento.
Sus padres son conscientes de ello y cuando Rain le dijo a su madre Rochelle que “por favor, no dejes que papá vuelva a salir”, refiriéndose a que no saliese a despedirle antes de irse a la escuela, su padre Dale (amputado de una pierna) le dió una dura lección…
Decidió que no solo iba a salir cada día a despedir a su querido hijo a la parada del autobús sino que lo haría de la manera más ridícula posible.
No sabemos qué graves consecuencias psicológicas ha tenido este hecho con el atormentado adolescente pero nos encanta el humor del progenitor y cómo se toma las cosas que le dice su hijo.
Lejos de herirle, ya que lo más probable fuera que su hijo se avergonzase de él por su minusvalía, le enseña que la vida hay que tomársela con positividad.
En una época en la que su vida está llena de dudas, inseguridades y frustraciones, este padre le enseña que no importa lo que el resto de la gente piense. Uno tiene que ser uno mismo sin afectar lo que digan los demás.
Da igual si viste de pirata o viste de mujer, no hay un traje que le haga quedar lo suficientemente ridículo como para no ponérselo. Es una manera muy peculiar de hacerle ver a su hijo las cosas importantes de la vida.
La imaginación del padre parece no tener fin, así como el fondo de su armario. Cada día aparece con un traje nuevo a cada cual más divertido y loco. No sabemos qué piensa el hijo al respecto, quizá ahora odie a su padre, pero en el futuro lo recordará como una de las mejores lecciones que le dieron nunca.
Fuente: www.enteratedealgo.es