Francisco Díaz, quien residía en Chile y estaba de vacaciones en Argentina, murió por el disparo de una bala de plomo en la madrugada del pasado sábado durante una fiesta, detallaron portavoces policiales. El hecho ocurrió luego de que un vecino llamara a la policía por ruidos molestos.Al parecer, los jóvenes que se encontraban en la vivienda arrojaron piedras a un patrullero policial que acudió al lugar y, posteriormente, el joven murió por un disparo, relataron testigos del episodio.
os once policías, pertenecientes a la Unidad Especial de Patrullaje del departamento mendocino de Godoy Cruz, están detenidos en la cárcel de Contraventores de Investigaciones a la espera de ser indagados por la justicia.